Sin embargo, los profesores especializados en la materia explican a Vozpópuli que se trata de un mix de lo que, hasta el momento, habían sido dos asignaturas distintas. Por ende, coinciden, los contenidos de Economía se ven mermados. 

María de los Ángeles Bonilla, profesora del IES La Morería de Mislata (Valencia), sostiene que la materia planteada en el decreto "es una fusión" y que "la pérdida de contenidos económicos básicos es significativa". "La perspectiva económica solo figura en uno de los bloques de saberes. Se analiza el entorno empresarial y social, pero sobre todo de cara al emprendimiento. Fenómenos que afectan a la vida diaria como la inflación no están y, aunque un profesor los pueda impartir, si quiere, en el apartado de sistema financiero, sería a modo de pincelada porque ni siquiera están planteados", sostiene.

Bonilla defiende que la Economía es una asignatura "muy práctica para la vida diaria" y que "sería interesante que los alumnos aprendieran" esta disciplina con profesores especializados. "Esperemos que las CCAA, que ahora deben encargarse de desarrollar gran parte del currículo, pongan criterio para solucionar lo ocurrido con la asignatura de Economía".

El nuevo decreto para la ESO viene a simplificar el anterior de la LOMCE. Lo que algunos profesores definen como un texto exhaustivo y detallado, otros lo consideran farragoso. Con la nueva ley, el Estado establece el 60% del currículo, mientras que el otro 40% corresponde a las autonomías.

Juan Pedro Molina, presidente de la Confederación Estatal de Asociaciones de Profesorado de Economía en Secundaria (CEAPES), considera que el nuevo decreto de la ESO "adelgaza" el anterior y que, ahora, serán las comunidades autónomas las que tendrán que dar encaje a los contenidos económicos.

"Había dos itinerarios. En el de Economía se impartía una formación aceptable donde se enseñaba el desempleo, la inflación, los tipos de interés, el gasto público, los tipos de impuestos... Estaba más enfocada a los problemas económicos con los que, precisamente, nos bombardean los medios de comunicación diariamente. En cuestión de nada, la inflación se va a disparar a los dos dígitos y muchas personas no saben lo que es", lamenta Molina.

El otro itinerario -continúa el profesor desde Castilla La Mancha- era el de enseñanzas aplicadas y los alumnos que aprendían Iniciación a la Actividad Emprendedora y Empresarial de cara a incorporarse al ámbito profesional. "Se daba gestión presupuestaria, economía familiar...", apunta.

"El recorte a la asignatura de Economía desde el Estado es catastrófico, es mucho más light, pero hay una segunda parte a nivel autonómico muy importante, así que entiendo que serán los distintos gobierno regionales los que tienen que desarrollar las optativas. Antes, la oferta de lo que había que ofrecer te la daba el Estado detallada y ahora hay un currículo más abierto y flexible", puntualiza.

La inflación en la LOMCE

En concreto, la inflación aparecía mencionada 14 veces en el decreto de la LOMCE para 4º de la ESO. Se estudiaba en el Bloque 5 referido a 'Economía y tipos de interés, inflación y desempleo'. El Estado establecía por ley que los alumnos tenían que diferenciar las magnitudes de tipos de interés, inflación y desempleo, así como analizar las relaciones existentes entre ellas.

Además, tenían que interpretar datos y gráficos vinculados con los conceptos de tipos de interés, inflación y desempleo y valorar diferentes opciones de políticas macroeconómicas para hacer frente al desempleo. También instaba a describir las causas de la inflación y valorar sus principales repercusiones económicas y sociales.

El decreto de la ESO aprobado este martes no habla específicamente de inflación, aunque aborda varias competencias. Según el texto, el currículo de Economía y Emprendimiento "está diseñado tomando como referentes los descriptores operativos que concretan el desarrollo competencial establecido en el Perfil de salida del alumnado al término de la enseñanza básica".

Asimismo, continúa el decreto, se ha desarrollado con la vista puesta en los objetivos fijados para la etapa de la ESO, contribuyendo a desarrollar en el alumnado "el espíritu emprendedor y la confianza en sí mismo, la participación y el sentido crítico, la iniciativa personal, y la capacidad para aprender a aprender, planificar, tomar decisiones y asumir
responsabilidades".